Ella era la última mujer en el mundo de la que debía enamorarse...
Cuando el fuego destruyó todo lo que tenía Maddie Brooks, el ranchero Trey Walker le ofreció a la bella veterinaria un lugar donde quedarse. Maddie era dulce y sexy, pero Trey no podía dejarse llevar por la atracción que había entre ellos por culpa de la tradición de los Walker.
Trey pertenecía a una larga sucesión de hombres condenados a romper el corazón de las mujeres, y él estaba decidido a no romper el de Maddie. Pero resultaba muy difícil resistirse sabiendo que dormía en la habitación de al lado...
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