Cuando la cantante de música country Priscilla Jayne Morgan tuvo que despedir a su manager, la prensa sensacionalista trató de sacar el máximo provecho de la historia. Entonces, su discográfica contrató a un guardaespaldas para que la acompañara durante la larga gira de verano, y eligieron precisamente a Jared Hamilton, el hombre al que Priscilla había adorado en otro tiempo. Ya no le importaba lo guapo y sexy que fuera. Habían pasado muchos años y no iba a permitir que le dijera lo que tenía que hacer.
Jared recordaba perfectamente lo testaruda… y seductora que podía llegar a ser P.J. Debía recordar que era un profesional y mantener el autocontrol en todo momento… porque iba a pasar cinco largas semanas atrapado con la chica más salvaje del mundo del espectáculo…